El Informe de la LX Legislatura

 

El Informe de la LX Legislatura, Por Andrés González Arias

Querétaro capital y todo el estado, amaneció cobijado por la abundancia –y bendita– lluvia.

En el Centro Histórico, sus canteras lucen en todo su esplendor su color rosa. Y relucientes de limpias.

Todavía temprano caía ligera llovizna. El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe, El Informe

Ahí, en el Teatro de la República, es el Primer Informe del Poder Legislativo. Y es, por ley, que se informe a la ciudadanía, al pueblo.

Pero ahí y físicamente, en el histórico lugar, asiste la clase política, pero no el pueblo. No físicamente en el Teatro; sí se informa en redes sociales, por la radio, pero ahí no. Es más, ni lo dejan entrar, cuando gran parte del lunetario lució vació. Y en su parte trasera, ni pueblo ni políticos.

Apenas pasadas las once de la mañana, se da el posicionamiento de los grupos parlamentarios. Pobreza ideológica de grupos; de fracciones sin conciencia de ser oposición.

Es, a fin de cuentas, la fiesta de los azules. De los 25 diputados, del PAN son 13; del PRI solo 3; de Morena están cinco y 3 –o ya dos– de lo que fue Querétaro Independiente.

Como en casa, inician los posicionamientos.

Es el diputado Manuel Pozo Cabrera, quien alguna vez fue priista –hasta candidato a la alcaldía de Querétaro– y en el pasado proceso electoral, candidato en común con Querétaro Independiente y el PAN. Sí, partido del que le impresionó y marcó, su humanismo. “El rostro de la persona manifiesta una dignidad única, insustituible e imborrable, que permanecerá como un reclamo de justicia ante la conciencia de los demás. Justicia y conciencia que dan sentido, talante y dimensión moral a la convivencia social y al quehacer político, y que son el origen y fundamento de todo derecho cuyo servicio deber estar el Estado y la sociedad”. ¿Será?

De Querétaro Independiente solo le queda la marca de registro. Y con este y ahora, ni compromiso moral, ni agradecimiento. A sus fundadores, claro.

Y viene el posicionamiento de la diputada, Graciela Juárez, priista y ahora, sin casi ir a ese partido. Su intervención no lleva el sentir ni de la dirigencia ni –al menos– del tercer diputado priista. El incómodo Paul Ospital.

“Como grupo legislativo del PRI, hemos sido responsables y conscientes de establecer una adecuada relación entre los Poderes del Estado, ya que, trabajando permanentemente, consolidaremos la división de poderes en cuanto a su autonomía e independencia, sino que hoy debe ser una unión fuerte, en sintonía, que nos permita coordinar esfuerzos y estrategias, que fortalezcan las instituciones públicas para poder hacer de Querétaro un mejor estado”. ¿Premonición de alianza?

Precisamente hoy y allá, en la CDMX, la hacen pública.

En los diez minutos que le dieron a cada ponente, Chela Juárez propone, sin embargo, “un dialogo plural, constante y permanente, con sus posibles divergencias, pero eso sí, que no impida que la civilidad prevalezca para lograr coincidencias(…) trabajo legislativo con seriedad y con un verdadero compromiso, porque todos, todos somos Querétaro”.

Ahí, entre los invitados, estaban casi todos los dirigentes de los partidos políticos; alguna representación de los colegios y asociaciones; del sector campesino ni se acordaron. Bueno, con decirle que el dirigente de la ganadera, no fue invitado.

A nombre del Grupo Legislativo de Morena –bueno, de una parte– hizo uso de la palabra el diputado Christian Orihuela Gómez.

Orihuela no desperdicia ni desaprovecha su intervención para publicitar sus preferencias de partido, el de sus personas, el que está en Palacio Nacional o la que pueda venir.

“El trabajo de mis compañeros, el mío propio es y será siempre estar cercano a todos los sectores de la población, como lo demuestra nuestro presidente, Andrés Manuel López Obrador, estar cerca a los pobres(…)”.

Pero de plano abrió su corazoncito al hablar de la mujer, al florear particularmente a la Dra. Claudia Sheinbaum, “quien viene realizando desde hace años una de las labores más importantes y difíciles del país y que es gobernador la CDMX”. Bueno, hasta mencionó a Martí Batres ¡En un posicionamiento legislativo y en el estado de Querétaro! Bueno.

Entre los invitados y en la octava filas de luneta, estaba Mauricio Ruiz Olaes, el delegado de Morena en Querétaro en funciones de presidente y quien apenas –y ante lo dicho– apenas sonrió. Inmutable el rostro de la rectora de la UAQ, Teresa García Gasca, a unos cuantos lugares de Ruiz Olaes. Ambos, con abiertas –o discretas– intenciones de participar en el proceso electoral del 24. Claro, por este partido, Morena.

Resuelta –pero también dispuesta a figurar, sea como reciclable o para la alcaldía de El Marqués– toma la tribuna la diputada Alejandrina Verónica Galicia Castañón, en representación del grupo legislativo de Acción Nacional, el partido que gobierna.

“Somos el partido que defiende y actúa de manera responsable y constructiva por la democracia en el estado”, puntualizaba.

Su intervención es impecable desde el punto de los valores universales y de partido. De cualquier partido en el mundo, con valores como el respeto, la tolerancia, el pluralismo, la legalidad, la libertad, la equidad y el diálogo. Se apegó pues, al librito de la buena política.

Y cierra así: “Nos queda muy claro que Querétaro crece gracias a su gente”.

Cuando termina, se nombra a una comisión para recibir al gobernador, Mauricio Kuri y la magistrada presidenta del TSJ, Mariela Ponce Villa. Faltan diez minutos para las doce horas, cuando apenas abría el sol.

Es entonces que se procede a rendir los honores a nuestro lábaro patrio. Presentes y en este Primer Informe del Legislativo, los tres poderes del estado.

Y es el diputado Luis Antonio Zapata Guerrero, presidente de la mesa directiva de esta LX Legislatura, quien toma la palabra.

Abre con una cita del panista Carlos Castillo Peraza. Y cierra su intervención –de 40 minutos– con cita de otro panista, de Manuel Gómez Morín. El librito azul no lo deja.

Su exposición-informe, lo divide en cuatro precisos ejes, que incluyen los de seguridad, salud –entre otros– pero también el muy difícil y complicado del agua, tema que se les sobrecalentó en esa legislatura, precisamente por la no inclusión de amplios sectores de la sociedad.

“Este tema ha sido de los más sensibles, que ciertamente generó polémica, pero también de mayor beneficio a la sociedad”.

Y claro, ya lo adivinó usted. A este informe no se invitaron a los ambientalistas. Si no los invitaron para la “polémica” ley, menos al informe.

Y en ausencia de estos, es que suelta:

“No se privatiza el agua. Al contrario, se establecen de forma puntual y clara las reglas de operación para los concesionarios que operan en el estado”.

Entonces ¿Por qué los excluyeron?

Son ya las 12 con 22 minutos. La lluvia había ya desaparecido, pero el compromiso no.

El prestigio legislativo tiene dos años para recuperarse.

 

 

 

Andrés González

Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.

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