Menos Mal que Bernal vuelve a ser cantina pública
Menos Mal que Bernal vuelve a ser cantina pública, por Samuel Pérez Rios.
Menos Mal que estamos en Semana Santa, la semana mayor para la comunidad católica de nuestro país, tiempo de guardar y reflexionar y nada mejor para medir el gran desapego de la sociedad civil a las tradiciones religiosas que visitar el Pueblo Mágico de Bernal, en el municipio de Ezequiel Montes, en donde las autoridades municipales sigues sin poder controlar la venta excesiva de bebidas alcohólicas para consumo en la vía publica, lo que ocasiona que al recorrer sus calles, dudemos del título de Pueblo Mágico otorgado en el año de 2005.
Pues a pesar de los constantes esfuerzos de la actual administración, Bernal se ha catalogado como un destino ideal para embriagarse a un bajo costo y sin ningún tipo de limite por parte de la autoridad. Las banquetas, corredores, calles y callejones se llenan de puestos ambulantes que ofertan desde el típico jarrito de tequila con refresco y chile, hasta la michelada servida en un pene de plástico, para poder ir saboreando tu bebida a media calle. cantina, cantina, cantina, cantina, cantina, cantina ,
El riesgo mayor surge cuando ya con unas copitas de más, los visitantes optan por rentar cuatrimotos, que sin ninguna restricción, circulan por todas las calles carentes de las más mínimas medidas de seguridad, como un casco apropiado, o sillas especiales para los menores de edad, que en su mayoría simplemente son acomodados entre sus padres para poder disfrutar de un vibrante paseo por los senderos de la localidad.
En días pasados, las autoridades en conjunto con cámaras de comercio locales, recorrieron el pueblo para regularizar algunos de los comercios establecidos, completando la clausura de una decena de ellos por diversas causas administrativas, pero el comercio informal, aquel que no genera ningún beneficio para los bernalences, ese queda sin freno, sin supervisión y con la libertad total de realizar faltas administrativas y hasta abusos al cliente, pues con el pretexto de que son días festivos, los elementos de supervisión municipal brillan por su ausencia.
El título de Pueblo Mágico fue logrado a base de esfuerzos de autoridades y empresarios que invirtieron tiempo, dinero, y profesionalismo; tristemente el día de hoy, Bernal se parece más a Tepoztlán en el estado de Morelos, quien comparte el riesgo de perder el distintivo de Pueblo Mágico, también por el abuso en el consumo de alcohol en las calles y no en preservar la identidad, la cultura, las tradiciones y la gastronomía de la región.
Desde luego que todo mexicano tiene derecho a divertirse y pasar un rato familiar, en inclusive a embriagarse hasta perder la razón, pero su derecho termina cuando inicia el derecho de la ciudadanía de mantener los sitios turísticos sin borrachos orinando en la banqueta, o caminar entre calles vomitadas y malolientes.
El hecho es que Bernal está en riesgo de perder no sólo un título o denominación, se está perdiendo la tranquilidad, la comodidad y la imagen de ser uno de los destinos turísticos más hermosos del país a cambio de unas cuantas miches, creo que no hay punto de comparación.
Esperemos que la actual Alcalde Lupita Pérez Montes no se convierta en la primera en perder el control de un destino turístico en el estado, pues esa mancha, difícilmente dejará de seguirla tanto política como personalmente, afectando tanto su imagen, como la de su municipio que tanto dice amar.
Menos Mal / Por: Samuel Pérez Rios.
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